De acuerdo a la información brindada por las autoridades sanitarias de Estados Unidos, más de 10 millones de vacunas contra el covid-19 fueron desechadas desde el 1 de marzo. Entre las principales causas se encuentra la falta de voluntarios que ocasiona que las vacunas sean separadas para el uso humano.

El número de dosis desperdiciadas fue reportado por los Estados o las farmacias que administran las vacunas a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), principal agencia federal de salud pública del país. En ese sentido, entre las principales causas se encuentra la fecha de caducidad rebasada, error de dilución, problemas de refrigeración, frascos fisurados.

Conviene mencionar que  la vacunación anticovid sigue siendo muy desigual en el mundo y la carrera para obtener dosis es una realidad, ya que varios países no han podido hasta el momento inmunizar más que a una pequeña parte de su población, sobre todo en África.